La familia de Carlos Andrés Bartlett denunció el accionar desmedido de la Policía durante una persecución que, según su relato, habría llevado a la muerte del joven en la localidad correntina de Goya . Lilia Refojos, madre de la víctima, aseguró que su hijo fue atacado incluso cuando ya estaba rendido en el suelo. "Lo dejaron morir, instigados por el odio de un enfermo que se dedica a brindar seguridad en eventos populares", expresó.

El testimonio de Refojos fue respaldado por las cámaras de seguridad, donde se observa el movimiento del móvil policial intentando demorar al joven. La madre solicitó que la comunidad la acompañara en una "marcha de silencio" durante el velorio de su hijo, pidiendo justicia y castigo para los policías y el civil involucrado en los hechos.

El incidente ocurrió el sábado por la noche en Goya, en las cercanías de las calles Rolón y Ferré. La Policía recibió un aviso sobre la actitud agresiva de Bartlett, quien portaba un cuchillo. Testigos afirmaron que el joven amenazaba con el arma a personas que no estaban presentes. 

Para evitar que el joven se lastimara o causara daños a terceros, los agentes solicitaron apoyo de otros móviles. Según los testimonios, cuando los efectivos intentaron reducirlo, Bartlett atacó a los policías, quienes se resguardaron dentro del móvil policial para protegerse.

En ese momento, el joven intentó huir, pero fue finalmente detenido por los policías. Aunque fue trasladado rápidamente en ambulancia hacia el hospital, Bartlett falleció antes de llegar al centro de salud. El personal médico constató su muerte en el camino.

Parte del episodio quedó registrado por una cámara de seguridad. Las imágenes muestran cómo un patrullero intercepta al hombre y lo embiste en al menos tres oportunidades. Finalmente, Bartlett habría sido reducido, esposado y trasladado al hospital.

La Fiscalía se hizo cargo de la investigación y realizó las pericias en el lugar del hecho. El cuerpo de Bartlett fue trasladado al Instituto Médico Forense de Corrientes Capital para la autopsia, cuyos primeros resultados indicaron que la muerte no fue producto de un evento traumático. Se aguardan los estudios toxicológicos para determinar si hubo alguna otra causa.

El caso continúa siendo investigado mientras la familia de Bartlett exige justicia y el castigo correspondiente para los responsables de su muerte. La denuncia de la familia sigue siendo un punto central en la investigación.

A medida que avanzan las pericias, la comunidad se mantiene atenta a los desarrollos del caso, mientras la madre del joven reiteró su pedido de justicia por su hijo y por todos los involucrados en el hecho.