El calor se extiende en gran parte de la Argentina esta semana, y son muy pocas las zonas donde no se superan los 30 °C de máxima, tales como el sur de la Patagonia o la costa Atlántica bonaerense.
Sobre el centro y noreste de la Argentina, en donde prevalecen condiciones de tiempo más estable, continuará la persistencia de buen tiempo a lo largo de buena parte de la próxima semana, fomentando un sostenido ascenso de las temperaturas.
Las temperaturas alcanzarán máximos históricos
El periodo crítico de esta ola de calor será entre el lunes y el jueves, subiendo progresivamente las temperaturas, hasta alcanzar picos de entre 38° y 40°, según qué sector de la provincia.
Facundo Azar, miembro del Centro de Monitoreo Meteorológico y Climático SAT, destacó que el verano recién comienza a mostrar sus verdaderas características.
“Estas van a ser las primeras temperaturas elevadas de verdad que vamos a tener porque en sí el verano fue bastante benévolo. Diciembre cerró con temperaturas por debajo de las medias históricas en la provincia de Santa Fe”, resaltó.
Sin embargo, el especialista advirtió que las condiciones cambiarán notablemente en los próximos meses. “Si uno mira los pronósticos trimestrales de verano, que abarcan diciembre, enero y febrero, muestran temperaturas elevadas para todos esos meses. Si diciembre tuvo temperaturas más bajas, enero y febrero van a tener que compensar con temperaturas más altas de lo habitual”, detalló al respecto.
Volviendo a esta semana, Facundo destacó que a partir del viernes irá ingresando un débil frente frío a la región central de la Argentina, aumentando la inestabilidad y propiciando probablemente áreas de lluvias y tormentas aisladas que, junto con la rotación de vientos, traerían un leve a moderado descenso térmico y cortarían este periodo de ola de calor en el centro de la Argentina.
Toca protegerse
Azar hizo hincapié en la importancia de generar conciencia para evitar problemas derivados del calor. “Siempre es bueno remarcar que, aunque vamos a tener temperaturas elevadas, hay recomendaciones que podemos seguir para mitigar sus efectos”, resaltó.
Y destacó que las mejores medidas de protección son “evitar ponerse al sol entre las 11 y las 16 horas, usar ropa clara y liviana, mantenerse bien hidratados y prestar especial atención a los grupos de riesgo. Estas precauciones ayudan a que, a pesar de que vayamos a transcurrir días de temperaturas elevadas, podamos sobrellevarlas”.
El especialista subrayó que estas medidas, aunque básicas, son indispensables. “Nunca está de más recordarlas porque son las que, a la larga, evitan los impactos negativos del calor sobre la salud”, resaltó al respecto.
Finalmente, uno de los responsables del CMMC SAT recordó la importancia de no subestimar la situación y de mantenerse informados.
“El primer calor puede hacer que la gente esté desacostumbrada a tomar las precauciones necesarias. Nosotros apostamos a que, comunicando correctamente lo que puede pasar meteorológicamente hablando y acercando las recomendaciones, la gente pueda tomar las decisiones adecuadas para mitigar los efectos del calor”, concluyó.