El 14 de enero de 2018, después de simular durante décadas que habían formado una familia soñada e ideal, David Allen Turpin y Louise Anna Turpin fueron descubiertos. Tuvieron 13 hijos, pero al contrario de lo que mostraban sus redes sociales, los hacían vivir un verdadero infierno.
Aquel día, una de sus hijas de 17 años de edad logró escapar de su casa en Perris, California y se contactó con la policía. Durante toda su vida estuvo encadenada, la golpeaban recurrentemente, le permitían comer una vez al día y bañarse una vez al año. Lo mismo ocurría con sus otros 12 hermanos, de entre 2 y 29 años.
Al llegar al lugar, las autoridades se encontraron con los 13 hijos de David y Louise en un estado deplorable. 7 de ellos eran mayores de edad, pero según El País, “estaban tan desnutridos que aparentaban ser de menor edad”. La mayor de la familia, por ejemplo, tenía 29 años y pesaba solo 37 kilos.
Además, algunos de ellos desconocían conceptos tan básicos como qué era la medicina o qué funciones cumplía la policía. En BBC, explicaron que el entorno era “oscuro y hediondo”. Además, la policía dijo que “las víctimas parecían estar desnutridas y muy sucias”
A pesar de las décadas de maltratos y aislamiento, los tíos y abuelos de los jóvenes se sorprendieron al enterarse de la noticia y explicaron cuáles eran las señales que ignoraron con el paso del tiempo.
Según CNN, la hermana de Louise suplicó durante años ver a los menores pero nunca se lo permitieron. Otra tía de las víctimas manifestó que le preocupaba el peso de los niños. Por otro lado, la tía abuela dijo: “Con las fotos familiares que subían a Facebook, pensábamos que eran una gran familia feliz”.
Dónde vivió la familia Turpin y qué hacían en su vida personal
En cuanto a su vida personal, David era un ingeniero informático que ganaba alrededor de 140.000 dólares al año en la compañía Northrop Grumman, según pudo saber Washington Post. Además, tenía cerca de u$s150.000 en activos, pero se declaró en quiebra en 2011. Su mujer, Louise, era ama de casa.
El matrimonio era seguidor del pentecostalismo, una rama del evangelismo. Además, de acuerdo a lo expresado por ABC, David y Louise aseguran que siguieron teniendo hijos porque “Dios los llamó” a hacerlo.
Dentro de la educación desde casa que implementaban con todos ellos, los obligaban a aprender de memoria los versículos de la Biblia.
De 1986 a 2003, vivieron en Forth Worth, Texas, donde empezaron a ocurrir los maltratos. En 2010, abandonaron una casa en Rio Vista, Texas y los vecinos de la zona denunciaron que la dejaron llena de excremento, con cuerdas atadas a las camas y con la presencia de gatos y perros muertos.
Cómo fue el heroico escape de dos de las hijas de la familia Turpin
El escape de dos de las hijas de la familia Turpin fue planeado durante dos años. Cuando llegó el día, aquel 14 de enero de 2018, la menor de 13 años volvió a la casa por miedo de ser descubierta, pero su hermana de 17 siguió adelante. Llamó a la policía y les mostró fotos de las condiciones en las que vivían, destapando el escándalo.
Según Global News, los padres de las víctimas se mostraron “perplejos” y no pudieron explicar lo que los agentes vieron al llegar al lugar. Entre las atrocidades encontradas, uno de los jóvenes, de 22 años de edad, estaba esposado a su cama mientras que otros dos habían sido esposados justo antes.