Un grupo de policías recién egresados del ISEP (Instituto de Seguridad Pública de Santa Fe) desató una polémica al publicar en redes sociales imágenes y comentarios mostrando el armamento provisto para el servicio. El hecho generó indignación entre efectivos en actividad, quienes expresaron su rechazo en distintos grupos y foros internos.

Reacciones dentro de la fuerza

Las críticas no tardaron en llegar por parte de otros uniformados, quienes consideran que este tipo de publicaciones afectan la imagen y la profesionalidad de la institución.

“Nos hacen quedar mal a todos los uniformados, esta gente no tiene que pertenecer”, expresó un policía en redes.

Otro mensaje cuestionó la formación que reciben los nuevos efectivos en el ISEP:

“¿No se les enseñó que estas cosas NO SE PUEDEN HACER?”

Además, hubo quienes señalaron una aparente falta de filtros en el ingreso a la fuerza:

“Antes se hacían miles de entrevistas y averiguaciones, no se ingresaba con tatuajes ni con antecedentes, ahora entran hasta los que estuvieron presos”.

¿Falla en la formación?

La viralización de las imágenes ha llevado a que muchos policías experimentados cuestionen la formación y el control sobre los nuevos ingresantes. Algunos sostienen que el problema no es solo de los agentes, sino de quienes deberían impartir disciplina y valores en la academia.

“Se perdió el respeto por el uniforme, pero si la cabeza falla…”, lamentó un efectivo con años de servicio.

Expectativa de sanciones

La polémica también puso el foco en la manera en que las autoridades disciplinan a los agentes. Mientras que muchos efectivos han sido sancionados por faltas menores, ahora se espera que la conducción de la Policía tome medidas concretas sobre este episodio.

“Esperemos que los cráneos tomen cartas en el asunto, así como se encargan de perseguir al personal y armarles causas porque sí”, manifestó un uniformado.

El incidente ha reavivado el debate sobre los criterios de selección y formación de los nuevos policías en Santa Fe, en un contexto donde la inseguridad y la falta de profesionalismo en la fuerza son temas de preocupación constante.

¿Están verdaderamente aptos para el servicio? 

La polémica pone en duda si realmente están aptos para el servicio. La cuestión no es solo el acto de exhibir armamento en redes sociales, sino qué dice este comportamiento sobre su formación, criterios de ingreso y disciplina dentro de la fuerza.

¿Fallos en la selección y capacitación?

Históricamente, el ingreso a la institución requería rigor en los procesos de selección. Se evaluaban antecedentes personales, se realizaban entrevistas psicológicas y socioambientales, y existían criterios estrictos sobre conducta y perfil del aspirante. Sin embargo, en los últimos años se ha señalado una flexibilización de estos requisitos, priorizando la cantidad de efectivos sobre la calidad de su formación.

“Nos hacían hacer miles de entrevistas y averiguaciones, no se ingresaba con tatuajes ni con causas, aunque hayan estado cerradas”, comentaron en redes algunos efectivos con más años de servicio.

¿Qué dice este episodio sobre la formación?

El hecho de que los nuevos agentes no comprendan la gravedad de exhibir armamento en redes indica posibles fallas en la instrucción dentro del Instituto de Seguridad Pública (ISEP). Si bien se enseña el uso responsable del armamento, este episodio deja entrever que no hay suficiente énfasis en normas de conducta, manejo de imagen institucional y ética profesional.

Además, este tipo de actitudes reflejan una falta de conciencia sobre los riesgos que implica revelar información operativa en redes. Un agente de seguridad no solo debe conocer el uso del arma, sino también la importancia de la reserva y el profesionalismo en su rol.

¿Qué medidas deberían tomarse?

Si la conducción de la Policía de Santa Fe quiere evitar que el desprestigio y la falta de profesionalismo sigan creciendo, es imprescindible:

ߔ¹ Revisar los criterios de ingreso, asegurando que los aspirantes realmente cumplan con perfiles adecuados.

ߔ¹ Reforzar la formación en ética policial, manejo de redes y conducta profesional.

ߔ¹ Aplicar sanciones ejemplares, dejando claro que este tipo de comportamientos no serán tolerados.

ߔ¹ Fortalecer la supervisión de los nuevos efectivos, con seguimiento cercano de su desempeño y adaptación al servicio.

¿Son aptos para el servicio?

Hoy, la respuesta es incierta. Este episodio demuestra que algunos de los egresados no han internalizado valores esenciales para la función policial. Si bien el entrenamiento físico y el manejo del arma pueden ser suficientes, la disciplina, la reserva y el respeto por la institución son aspectos que deben reforzarse urgentemente.

Si estas fallas no se corrigen a tiempo, la pregunta que sigue es: ¿qué otras actitudes irresponsables podrían tener estos agentes en una situación de servicio real?