EL TESTIMONIO DE SU HIJA LIDIA ADELINA LAMAZÓN PARA EL LIBRO “PERSONAJES DE MI PUEBLO” (autor; Profesor Raúl Enrique Dubouloy)

LIDIA ADELINA LAMAZÓN VIVÍA EN EL HOGAR DE ANCIANOS “SAN JOSÉ” DE VILLA OCAMPO EN ABOSOLUTA SOLEDAD, RODEADA POR SUS RECUERDOS. ES HIJA DEL MAYOR DIRIGENTE QUE TUVO EL RADICALISMO EN EL NORTE SANTAFESINO, DON ROGELIO LAMAZÓN.

“Me llamo Lidia Adelina Lamazón, mis abuelos eran vasco franceses y emigraron al Uruguay, se radicaron   en la ciudad de Paysandú y en esa ciudad se conocieron, se enamoraron y se casaron.

 Mi abuelo se llamaba Bernardo Lamazón y mi abuela Eloisa Poure. Trabajaron, formaron una gran familia compuesta por varios hijos y mi abuela tenía una hermana casada con un argentino y ellos vivían en Calchaquí, Departamento Vera. Alentaron mucho a mis abuelos para que vengan y mi abuela se entusiasmó tanto que comenzó a querer esta patria antes de conocerla.

Aproximadamente en el año 1883 decidieron venir y se radicaron en Calchaquí. La familia siguió aumentando y en el año 1887 nació mi papá -Rogelio Lamazón- y en el año 1891 nació Salvador y muchos confunden a dos mujeres que viven en Villa Guillermina como hijas de papá y no lo son; son hijas de Salvador es decir, son sobrinas de Rogelio.

Nací el 10 de marzo de 1927 en Villa Guillermina, mi mamá se llamaba Sara Piciochi y nació en Vera; mi papá -Rogelio Lamazón- nació en Calchaquí, el 12 de diciembre de 1887, aunque algunos dicen que era uruguayo cosa que no es cierto.

Virgilio Piciochi era mi tío, una persona muy conocida aquí en Villa Ocampo y que falleció hace ya un tiempo y también Juan Piciochi que vivía en Villa Ana.

Siendo muy pequeña nos fuimos a vivir por un tiempo a la ciudad de Vera y se desempeñó como Jefe de Policía, cargo que luego de unos años dejó, y decidió volver a comenzar de nuevo desde el llano a Villa Guillermina.

Tenía una fábrica de aguas gaseosas y su profesión era de Procurador Nacional y trabajaba con los mejores abogados de Santa Fe: los doctores Busaniche, Candioti, Atiche -entre otros- y casi todos los juicios eran de gente contra la Empresa La Forestal y la mayoría de ellos los ganaba.

Recuerdo que en una oportunidad lo quisieron sobornar para que abandone Villa Guillermina, le ofrecieron un millón y medio de dólares, pero por supuesto, no aceptó. También le ofrecieron altos cargos jerárquicos en la Empresa en otras provincias donde operaban, cargos en el Gobierno. Su lema era: “El hombre no se vende, no es una mercancía”.

Los primeros años de la escuela primaria los hice en la Escuela Provincial Nº 510 y ocurrió un problema. Resulta que había un correo escolar donde entre nosotros nos mandábamos cartitas quizás con la intención de aprender y mejorar nuestra redacción, pero primero era entre amigos y luego ocurrió que las cartas eran de los amigos a las amigas y esto disgustó a mi padre y consiguió que al Director de apellido Limas Páez la trasladaran. Me llevaron a Santa Fe al Colegio El Huerto donde completé la primaria. Venía dos veces al año a mi casa, en las vacaciones de julio y las de fin de año.

El secundario lo hice en el Colegio Santísima Virgen Niña en Buenos Aires, en ese colegio conocí a Delia Leonor “Chiquita” Alemany, Dorita Fiant entre otras que son de aquí de Villa Ocampo.

Mi padre me quería muchísimo. Una vez le pregunté:

-Papá ¿A quién querés más, a mí o a mi hermano?

-A vos hija, porque la mujer es la que en la vida sufre mucho.

Mi hermano se llamaba Roque Rogelio y era un año menor que yo y el menor se llamaba Oreste Bernardo y tenía 5 años cuando ocurrió este crimen. Con los años Oreste fue jefe de Agua y Energía en Reconquista una persona muy querida, ambos ya fallecieron.

Me casé en el año 1958 con Manuel Antonio Valliú, Oficial de la Policía Federal,  pero mi matrimonio fue algo que prefiero olvidar porque no fue nada bueno y no tuvimos hijos.

Mi papá editaba un pequeño semanario que se llamaba “Martín Fierro” donde hacía conocer todas las irregularidades de la Empresa. Es decir, mi papá tenía un solo enemigo, La Forestal, ¡¡¡pero qué enemigo!!!

LOS ATENTADOS CONTRA ROGELIO LAMAZÓN

Papá tuvo varios atentados anteriores y el otro día haciendo memoria me acordé de 8. Uno de ellos ocurrió en una noche de luna llena y usted podía leer el diario por la claridad de la misma. Papá estaba conversando con un maestro que vino a visitarlo y tuvo una intuición repentina, que alguien estaba rodeando la casa. Salió al patio y vio una persona que se acercaba agazapado entonces sacó su revólver calibre 44, disparó y por supuesto, esa persona huyó. Entonces se dio cuenta que muy cerca tenía un almacén propiedad del Comisario de la localidad de apellido Cabrera y seguramente era una persona mandada por él. A los pocos minutos la gente se acercó a mi casa porque papá era una persona muy querida.

En otra oportunidad los ingleses contrataron al mejor tirador del Chaco para que lo mate y además se lo hicieron saber, esta persona lo conoció a mi padre y se hicieron tan amigos que con su personalidad y simpatía lo conmovió y no cumplió con su contrato.

EL ASESINATO DE ROGELIO LAMAZÓN

Pero fui creciendo y yo solo venía en vacaciones a visitar a mis padres y estando en casa ocurrió el asesinato. Transcurría el mes de marzo de 1940 y yo esperaba con mucha ansiedad la llegada de mi cumpleaños ya que el 10 de ese mes estaba por cumplir 13 años.

El día sábado 2 de marzo mi papá se puso muy contento con el discurso del Presidente de ese entonces -el Doctor Roberto M. Ortiz- quién anunciaba el fin de lo que se llamaba “el fraude patriótico” es decir, alterar el resultado de las elecciones por medio de caudillos y matones que no dejaban que la gente pueda votar libremente. Recuerdo que con varios amigos muy atentos y alrededor de la radio escucharon este discurso que los puso muy alegres y renovó sus fuerzas y sus convicciones para las elecciones que se realizarían el día siguiente, el domingo 3 de marzo de 1940.

Pero en Guillermina no fue así, el domingo estaba todo organizado para asesinar a mi padre. ¿Quién planificó el asesinato?

¿Quién fue el que lo ordenó?

Eso nunca se va a saber, pero todos los indicios, todo lo que vieron los testigos, los alrededores de dos mil votantes simpatizantes de mi papá que estaban bajando del tren para ir a votar dicen que fue una orden de La Forestal.

Él no tenía custodia como mucha gente que escribe, escribió y sigue escribiendo sobre su vida lo afirma. Sus amigos más cercanos quisieron poner un auto con gente armada detrás del suyo porque sospechaban que algo estaba por pasar, pero no aceptó. Mi papá era un hombre distinto, fuera de serie, lleno de humildad.

EL ASESINATO

El asesinato ocurrió el domingo 3 de marzo a las 10:30 horas de la mañana. Minutos antes vino a casa en nuestro auto “Warner”, de fabricación alemana, junto con uno de sus sobrinos para avisarle a mi mamá que ponga más gaseosas en la heladera, que prepare más comida porque unos amigos de Reconquista vendrían a almorzar, yo estaba en la puerta y recuerdo ese momento como si fuera hace minutos…fue la última vez que vi con vida a mi querido papá, que tenía tan solo 43 años...

Había llegado un tren con votantes y mi papá y sus amigos lo estaban esperando para llevarlos al Comité de la Unión Cívica Radical y el primer dato que los alarmó era que había una cantidad enorme de gente con uniformes de policía, muchos de ellos mandados por el Gobierno de la Provincia de Santa Fe a cargo del Gobernador Iriondo, todos a cargo del Comisario Marobio Cordonera quien organizó todo el escenario de la tragedia que en minutos se estaba por producir.

Mi papá ve que esos policías con caballos comienzan a cruzarse delante de la gente para que no se dirijan al Comité, entonces mi papá sale para ver lo que estaba pasando y se dirige educadamente para conversar con este Comisario para preguntarle qué pasaba. Le recuerda las palabras del Presidente de la Nación del día anterior en cuanto a la libertad que debe imperar en las votaciones y en ese momento se siente un estampido, un tiro al aire y esa fue la señal, mi papá no pudo ni siquiera sacar su arma porque recibió un disparo en el parietal izquierdo de la cabeza por parte de un cuñado del comisario Cordonera y murió en el acto.

Cuando la gente vio lo que ocurrió se armó un tiroteo infernal, en esa época todo el mundo andaba armado, era permitido. Se dice que se produjeron más de 300 disparos y mucha gente fue herida. Mucha gente fue a casa a pedir armas para asaltar y tomar la Comisaría pero mi madre se negó. El Comisario Cordonera se hizo el muerto porque recibió un tiro en la rodilla, pero luego lo subieron a una camilla y tuvieron que llevarlo directamente a Santa Fe porque la gente lo quería linchar. Durante 20 años no pudo pisar el suelo y tuvieron que apuntarlo tres veces por eso creo en la justicia divina porque desde ese día que asesinó a mi padre jamás, jamás volvió a caminar.

EL VELATORIO DE LAMAZÓN

El velorio fue eterno, el cielo se venía abajo y parecía que hasta Dios se había enojado porque se armó una tormenta tremenda. Los trenes volvieron a los ramales casi vacíos porque la gente se quedó y le hicieron una guardia de honor. Los ingleses pintaban ser una cosa y en realidad eran otra.

Todas las cosas de su propiedad quedaron en posesión de mi madre pero ella dos años después de quedar viuda, se volvió a casar con Ovidio Blanco, una persona adicta al juego así que no tuvo una buena vida, pero bueno, ella quedó viuda con solo 31 años, hay que entender eso.

Sus cosas quedaron con mamá, sus escritos, cartas, en fin todo lo que tenía quedó a cargo de ella y se perdieron. No tenía una buena relación con el nuevo esposo de mi madre por lo tanto me fui a trabajar a Buenos Aires alrededor del año 1949, 1950.

Primero me fui a vivir a la casa de una tía y de a poco me fui independizando, pero siempre que podía regresaba a Villa Guillermina a visitar a mi madre, pero nunca más fue lo mismo: ya no estaba mi papá esperándome en la estación del tren.  Mamá tuvo dos hijos varones más uno de los cuales ya ha fallecido y el otro vive en Buenos Aires.

RECUERDOS

Yo estaba en el Colegio del Huerto en Santa Fe y papá cada 15 días viajaba a esta ciudad para hacer los trámites de los obreros de La Forestal que iniciaban acciones legales contra la Empresa. Me visitaba en el Colegio y los fines de semana visitábamos a unas tías que tenía en la ciudad, me compraba cosas, era un padre inigualable, muy generoso. Hubiera sido un hombre muy rico si hubiera querido, pero siempre afirmaba que la mayor riqueza es ser una buena persona, no tener una abultada cuenta bancaria. Hay muchos que tienen una buena cuenta bancaria pero hay que ver cómo la consiguieron. Creo que ser buena persona era algo muy profundo, diría casi biológico heredado de sus padres que también fueron  grandes personas.

No entiendo a la gente que recuerda a La Forestal como algo bueno. ¿Para qué? ¿Por qué? Si a usted le dan una casa para que viva mientras trabaja pero ellos ganan mucho dinero y cuando se van le ponen una bomba para su luz y para su agua: ¿Recordaría a esa gente?

La gente piensa que en esa época vivían como reyes, por un lado, lo tenían así para que duren; por el otro lado nada les costaba porque ganaban mucho dinero. Pero había otro sector de gente que sufría mucho, los hacheros por ejemplo, donde la tuberculosis hacía estragos.

Y en las fábricas no querían invertir en seguridad, en la zona donde se procesaba la madera y había un polvillo insoportable no querían colocar extractores de aire para eliminarlos. Un día mi padre consiguió entrar a la planta acompañado por un Juez directamente a la casa del “enemigo” tal cual se muestra en la película (Quebracho) y se labró un Acta con todas las falencias encontradas.

¿Sabe la cantidad de gente que moría de tuberculosis por aspirar el aserrín? Una vez consiguió que unos médicos vengan a dar una charla sobre lo nocivo que era para el organismo trabajar sin protección donde hay mucho aserrín en el aire y publicó en su revista esto. Fue tanta la presión que la Empresa tuvo que comprar e instalar todos los sistemas de protección; pero sólo lo hizo porque no tenían otra opción.

Los chicos que trabajaban con los bueyes desde los 12, 13, 14 años horas y horas, en los días de lluvia en el barro, atravesando monte, esteros, a veces hasta las 10 de la noche, algo realmente inhumano. Traían gente de afuera para que hable bien de la Empresa y decían que había escuela para todos, los hacían pasear por los lugares donde les convenía, pero ocultaban lo que no querían que se sepa. Pero mi madre en su semanario “Martín Fierro” contaba la otra cara de la Forestal, la cara perversa, la que nadie se animaba a contar. Un tío mío tuvo guardado creo que 50 números del semanario y pude sacar muchos artículos de allí.

LA SOLEDAD

Yo estoy sola y me duele mucho porque pienso que mejor homenaje a mi padre que darle una mano a su hija, pero eso no ocurre ni creo que va a ocurrir. Necesito estar sola, con una habitación grande y un baño me arreglaría porque soy una mujer prolija, pero no puedo vivir aquí en este lugar donde no me siento bien.

 En poco tiempo se está por publicar un libro sobre la vida de mi papá escrito por mí, el prólogo me lo hizo el escritor ocampense Atilio Bruno y está en estos momentos en una editorial de Avellaneda, se va a llamar QUEBRACHO, TANINO Y SANGRE. Quebracho para traer el recuerdo de la película –aunque personalmente no me gustó-;  Tanino y Sangre porque era el producto que utilizó La Forestal y que -además- es similar al color de la sangre de tantos obreros que murieron.

Los dirigentes radicales me visitaron para pedirme datos, pero para ayudarme nunca se acercan y me han prometido muchas cosas que nunca cumplieron. Uno de ellos hasta utilizó textualmente uno de los discursos que le di y lo utiliza como su presentación personal; ojalá que no lo elijan porque no es útil para la sociedad.

LO QUE PUBLICÓ “LA VOZ DEL NORTE” DIARIO SANTAFESINO EN EL AÑO 1940:

“La muerte de Rogelio Lamazón ha entristecido a todos por igual. Es que, cuando desaparece un luchador abnegado y fiel a su causa, lleno de valor auténtico y representativo de los ideales democráticos, un celoso defensor de las libertades cívicas y de la ciudadanía, un abanderado de las grandes causas, se produce un verdadero desgarramiento general en la masa colectiva.”

“Rogelio Lamazón era eso y mucho más; él, en su defensa leal y noble, no lo hacía por espíritu demagógico, ni con fines de explotación política. Lo hacía porque dentro de su corazón ardía la lámpara de las reivindicaciones sociales y era un devoto de ellas.”

“Por gravitación misma, por imposición, fue colocado en un puesto de vanguardia; el Partido Radical tuvo en él a uno de sus más caros soldados, dándolo todo sin pedir nada. Muere en plena lucha, con sus flamantes 43 años, en una gran tarea reinvindicadora.”

“Es la dura y cruel escuela, de la realidad vivida sin reservas, templó su espíritu y adquirió la experiencia necesaria llegando a la madurez, con tan acervo conocimiento.”

“Por eso su figura se agigantaba pidiendo espacio; lo escuchamos hablar en su último discurso (28/02/1940) en Villa Ocampo y el 25/02/1940 en Las Toscas donde demostró hasta el último día de su vida la gran profundidad de sus conceptos aplicados al bien público. Era un espíritu de suave belleza, un autodidacta, un maestro de sí  mismo.”

“Pierde el Partido Radical a uno de sus más grandes paladines, los pobres un padre, los amigos a un fiel y entusiasta compañero de todas las horas.”

IMPOSICIÓN DEL NOMBRE DE LA RUTA 100 “s” ROGELIO LAMAZÓN -TRAMO RUTA NACIONAL n° 11- VILLA GUILLERMINA

REGISTRADA BAJO EL Nº 12680

LA LEGISLATURA DE LA PROVINCIA SANCIONA CON FUERZA DE LEY:

ARTÍCULO 1º:  Designase con el nombre de "ROGELIO MARTÍN LAMAZÓN" al tramo de la Ruta Provincial número 100 S comprendido entre su intersección con la Ruta Nacional número 11 y la localidad de Villa Guillermina, departamento General Obligado.

ARTÍCULO 2°: Comuníquese al Poder Ejecutivo.

DADA EN LA SALA DE SESIONES DE LA LEGISLATURA DE LA PROVINCIA DE SANTA FE, A LOS NUEVE DÍAS DEL MES DE NOVIEMBRE DEL AÑO DOS MIL SEIS.

Edmundo Carlos Barrera - Presidente Cámara de Diputados -

María Eugenia Bielsa - Presidenta Cámara de Senadores

Diego A. Giuliano - Secretario Parlamentario Cámara de Diputados

José Luis Gramajo -  Subsecretario Legislativo Cámara de Senadores

SANTA FE, 07 de diciembre de 2006

De conformidad a lo prescripto en el Artículo 57 de la Constitución Provincial, téngasela como ley del Estado, insértese en el Registro General de Leyes con el sello oficial y publíquese en el Boletín Oficial.

Jorge Alberto Obeid Gobernador de Santa Fe

Esta ley fue promulgada, pero nadie se acordó que la hija de Rogelio Lamazón está viva, siendo que el Bloque de la Unión Cívica Radical presentó el Proyecto.

LO QUE PUBLICÓ “LA VOZ DEL NORTE” DIARIO SANTAFESINO EN EL AÑO 1940:

La muerte de Rogelio Lamazón ha entristecido a todos por igual. Es que, cuando desaparece un luchador abnegado y fiel a su causa, lleno de valor auténtico y representativo de los ideales democráticos, un celoso defensor de las libertades cívicas y de la ciudadanía, un abanderado de las grandes causas, se produce un verdadero desgarramiento general en la masa colectiva.

Rogelio Lamazón era eso y mucho más; él, en su defensa leal y noble, no lo hacía por espíritu demagógico, ni con fines de explotación política. Lo hacía porque dentro de su corazón ardía la lámpara de las reivindicaciones sociales y era un devoto de ellas.

Por gravitación misma, por imposición, fue colocado en un puesto de vanguardia; el Partido Radical tuvo en él a uno de sus más caros soldados, dándolo todo sin pedir nada. Muere en plena lucha, con sus flamantes 43 años, en una gran tarea reivindicadora.

Es la dura y cruel escuela, de la realidad vivida sin reservas, templó su espíritu y adquirió la experiencia necesaria llegando a la madurez, con tan acervo conocimiento.

Por eso su figura se agigantaba pidiendo espacio; lo escuchamos hablar en su último discurso (28/02/1940) en Villa Ocampo y el 25/02/1940 en Las Toscas donde demostró hasta el último día de su vida la gran profundidad de sus conceptos aplicados al bien público.

Era un espíritu de suave belleza, un autodidacta, un maestro de sí mismo.

Pierde el Partido Radical a uno de sus más grandes paladines, los pobres un padre, los amigos a un fiel y entusiasta compañero de todas las horas.”

DEL LIBRO “PERSONAJES DE MI PUEBLO” DE RAÚL ENRIQUE DUBOULOY - TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS- PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN PARCIAL O TOTAL SIN AUTORIZACIÓN DEN AUTOR.